No son pocos los errores que podemos estar cometiendo a la hora de lavar la ropa en lavadora. El uso de programas cortos, la sobredosificación de detergente y el escaso uso de altas temperaturas son algunos de los principales errores que se cometen en el lavado de las prendas y que, afectan tanto al cuidado de la ropa como al consumo energético o la durabilidad de las máquinas de lavado.
La conocida marca de electrodomésticos Miele, nos alerta de estos errores que podrías estar cometiendo al utilizar tu lavadora:
- Utilizar programas cortos para cuidar el medioambiente y ahorrar. Cuanto más corto es el programa, más energía consume, más coste económico supone y es mucho menos eficaz a la hora de realizar una correcta higiene de las prendas.
- Usar demasiado detergente. Usar demasiado detergente no sólo no limpia más la ropa, sino que puede deteriorar la lavadora y consume más agua, al aclarar más. Se recomienda seguir siempre las instrucciones marcadas por el fabricante del producto.
- Lavar con agua fría. Evidentemente el agua fría es muy neutral para la ropa, pero no consigue una correcta limpieza y genera la acumulación de gérmenes y bacterias en el tambor. Hay que perder el miedo a lavar con temperatura, respetando siempre las indicaciones de la etiqueta de la prenda.
- Usar siempre el mismo programa. Aunque se suele pensar que hay demasiados programas en la lavadora, lo cierto es que cada uno se adapta a las necesidades de cada tejido y todos son necesarios. Históricamente se usan entre 1 y 3, pero la innovación ofrece opciones más avanzadas.
Cómo cuidar las prendas de lencería y baño
- Separar colores y no tejidos. Aunque dos prendas sean del mismo color, no requieren el mismo tratamiento si son, por ejemplo, de raso y algodón. Hay que separar colores, pero también tejidos, a fin de conseguir un perfecto lavado y cuidado de la ropa.
- Cargar la lavadora al máximo. Esto evita un correcto lavado de la ropa, además produce muchas arrugas en las prendas y un deterioro de la máquina. Para prolongar la vida de tu lavadora, evita sobrecargarla con demasiada ropa.
- No tomar precauciones antes de meter la ropa en la lavadora. Siempre hay que cerrar cremalleras, poner del revés las prendas que así lo requieran y vaciar los bolsillos. De lo contrario, se producen deterioros tanto en la ropa como en las lavadoras.
- No realizar un correcto mantenimiento de la lavadora. Para que realicen un correcto lavado y se mantengan como nuevas durante más tiempo, hay que limpiar el filtro, usar limpiamáquinas y realizar cada dos semanas al menos un lavado a un mínimo de 60º. Cuando termine el programa elegido, deja la puerta abierta y seca bien la goma, así evitarás su deterioro. No olvides limpiar el recipiente del detergente y suavizante de vez en cuando.
- Usar el mismo detergente para todo y abusar del suavizante. No hay que usar el mismo detergente para todo o la misma dosificación de distintos detergentes. Además, se tiende a usar mucho suavizante y después secadora, que anula sus efectos aromáticos.
- No seguir las instrucciones de las etiquetas de las prendas. Aunque suelen ser extensas, siempre es recomendable mirarlas antes de lavar una prenda, porque un mal lavado puede tener un efecto nocivo sobre ella.
Consejos para un correcto cuidado de la ropa
Tras conocer los principales errores que se cometen a la hora del lavado de las distintas prendas, conviene tener muy presentes estos consejos que asegurarán un correcto cuidado de la ropa y una mayor eficiencia del lavado:
- La temperatura. Las recomendaciones en este campo son usar un mínimo de 30/40 grados y recurrir a ella no sólo cuando se separan colores. En el caso de la ropa de bebés y niños, que en ocasiones acumulan una mayor suciedad, se pueden usar 60/80 grados siempre que la etiqueta de la prenda lo permita.
- El tiempo de duración del lavado. En este caso, menos no es más. Y es que los lavados cortos no consiguen alcanzar cifras de temperaturas altas, son más agresivos para la mecánica de la lavadora y consumen más energía.
- Cantidad de detergente. Es importante no sobredosificar, especialmente en zonas de aguas blandas como es el caso de Madrid, ya que se tienen que intensificar los aclarados con todo lo que esto conlleva. Lo ideal es seguir las instrucciones del fabricante del producto, usar un detergente líquido, ya que se disuelve antes, y siempre desde el cajetín, para que cuando pase al tambor ya esté mezclado con agua.
- Mecánica de la lavadora. Las lavadoras ofrecen cada día más opciones, adaptadas a nuevas necesidades y estilos de vida, por lo que conviene elegir el programa adecuado para cuidar tanto el aparato como la ropa. Además, es frecuente olvidar realizar las tareas básicas de mantenimiento de la lavadora, como la realización de un ciclo de lavado a 90 grados con el tambor vacío una vez al mes.
- Evitar que se acumule la cal en tu lavadora y reste vida útil a este electrodoméstico, es mucho más sencillo y barato de lo que crees. Basta que pongas de vez en cuando una cucharada sopera de sal en el cajetín del detergente. Con este sencillo y económico gesto evitarás el exceso de cal y cuidarás tu ropa. También evitarás que la cal estropee tu lavadora, poniendo una vez al año un programa completo en caliente con la lavadora sin ropa y sin detergente, únicamente con 2 vasos de vinagre. Otra solución para evitar la cal y mantener libre de residuos la lavadora: cada tres meses lava (sin ropa dentro) con un ciclo corto a 30º y pon una taza de lejía en el depósito de jabón y otra de vinagre en el depósito de suavizante.
Cómo limpiar la lavadora paso a paso
Un buen mantenimiento de la lavadora es necesario tanto para prolongar su vida útil y evitar averías, como para que el lavado de las prendas sea perfecto. Ficha esta selección de recomendaciones para limpiar la lavadora por zonas:
Limpieza del cajetín para detergentes
Se recomienda limpiar el depósito de detergente cada 4 o 5 ciclos de lavado con el fin de evitar la acumulación de restos de detergente o polvo.
- Lo primero, es importante que utilices guantes para proteger tus manos de detergentes que puedan ser abrasivos para tu piel.
- Extrae el cajetín, lávalo con abundante agua tibia y jabón. Puedes hacerlo con la ayuda de un cepillo para terminar de limpiar las zonas más difíciles de alcanzar, como el accesorio del suavizante.
- Sécalo todo bien y vuélvelo a introducir, asegurándote de que quede bien puesto.
- Es posible que hayan quedado restos de jabón en el panel frontal de tu lavadora, así que aprovecha para limpiarlo con un paño húmedo, sin ningún tipo de detergente.
Además, no te olvides de la goma de la escotilla de la puerta, una zona especialmente sensible porque se acumula agua y no suele secarse manualmente la terminar la colada, lo que a largo plazo genera moho y zonas ennegrecidas. Limpia esas zonas con lejía y sécalas bien. La mejor recomendación para evitar que esto vuelva a ocurrir es secar bien la goma después de cada ciclo de lavado.
Limpieza del filtro de la lavadora
El filtro evita que objetos sólidos como botones, monedas o pelusas de los tejidos atasquen la lavadora durante la evacuación del agua de lavado. Es recomendable limpiar el filtro cada 3 meses, y hacerlo con la lavadora desenchufada y sin que se haya usado en el mismo día de la limpieza. Puedes seguir los siguientes pasos:
- Pon un pequeño cubo debajo de la cubierta del filtro, que encontrarás en la parte inferior delantera de la lavadora (tiene forma circular).
- Abre la cubierta, saca la manguera de drenaje, sitúala encima del cubo, y espera a que caiga toda el agua residual.
- Una vez finalizado el proceso, cuando no caiga más agua, gira el filtro y extráelo tirando del mismo.
- Limpia los residuos del filtro y vuelve a colocarlo.